Si quieres prima y prima, te decepcionará, pero Capri Anderson es ardiente, con una morena de ojos ahumados y se entrega a una intensa acción en solitario con un consolador que empapa la sábana de sus jugos pegajosos y en un placer propio que la lleva al borde. Todavía está en la naturaleza salvaje, rodeada de piscina, provocándose con juguetes y disfrutando de la rudeza.